En los estudios geotécnicos para cimentaciones superficiales, el Ensayo SPT en suelos es una herramienta esencial. Su aplicación permite estimar la capacidad portante admisible del terreno con base en datos obtenidos directamente en campo. Este tipo de cimentación —como zapatas aisladas, corridas o losas— requiere una caracterización precisa del suelo a poca profundidad, y el SPT ofrece resultados inmediatos y confiables para esa finalidad.
El ensayo, ejecutado dentro de una perforación, registra el número de golpes necesarios para hincar 30 cm un muestreador estándar después de un primer asentamiento. Ese valor N, corregido según factores normativos, se convierte en el punto de partida técnico para calcular las tensiones admisibles del terreno.
El valor N del SPT como indicador directo de capacidad portante en suelos granulares y cohesivos
Utilizamos diferentes correlaciones empíricas según el tipo de suelo para convertir el valor N del SPT en un parámetro mecánico útil. En suelos granulares, correlacionamos el N corregido (N60) con el ángulo de fricción interna para aplicar teorías de capacidad portante como Terzaghi, Meyerhof o Hansen. En suelos cohesivos, empleamos el mismo valor para estimar la cohesión no drenada, aplicable al análisis de fallas por cortante.
Estas correlaciones permiten predecir la carga que puede soportar una zapata sin inducir asentamientos inaceptables. Además, identificamos la profundidad efectiva de apoyo y la homogeneidad estratigráfica, factores clave para evitar subsidencias o fallas diferenciales en obras civiles.
Criterios de diseño geotécnico basados en datos del ensayo SPT: eficiencia estructural desde el terreno
La información del Ensayo SPT en estudios de cimentaciones superficiales también nos permite calcular asentamientos estimados bajo cargas de servicio. En suelos granulares, empleamos métodos como Schmertmann, y en cohesivos, fórmulas basadas en teorías elásticas. En ambos casos, la clave está en la correcta interpretación del perfil geotécnico a partir de los valores de golpeo obtenidos.
Al disponer de una serie vertical de valores N, definimos zonas competentes, capas de transición y posibles estratos de colapso. Esto permite proponer soluciones técnicas como profundización de la cimentación, ampliación de base o sustitución de material. Toda decisión parte del mismo principio: interpretación estructural del suelo basada en SPT.
Minimizar riesgos y optimizar costos es posible con un SPT bien ejecutado e interpretado
Uno de los principales beneficios de aplicar el SPT en esta etapa del proyecto es la optimización del diseño geotécnico y estructural. Cuando caracterizamos el terreno con datos reales, evitamos sobredimensionamientos innecesarios, seleccionamos el tipo de cimentación más adecuado y reducimos la incertidumbre asociada a variables geotécnicas.
Además, un análisis detallado de los datos del SPT permite plantear alternativas de mejora del terreno cuando las condiciones naturales no cumplen con los requisitos estructurales. Técnicas como compactación, inyecciones o sustitución controlada del suelo pueden justificarse técnica y económicamente desde un informe geotécnico bien sustentado.
El Ensayo SPT aplicado a cimentaciones superficiales sigue siendo uno de los pilares más robustos de la caracterización geotécnica. Nos ofrece un equilibrio entre simplicidad operativa, aplicabilidad práctica y valor ingenieril, siempre que se ejecute bajo control técnico y se interprete con criterio estructural.